La pandemia del Covid-19 hasta el momento ha afectado directa e indirectamente a los mas de 10.000 vigilantes de seguridad que existen en Costa Rica, cientos están desempleados actualmente, algunos enfermaron y otros lamentablemente fallecieron.

Fundamentalmente, los nuevos cometidos de las empresas de seguridad privada se concentran en asegurar la salud de las personas en los lugares públicos y privados, como por ejemplo controlar aforos, observar si se lleva la mascarilla adecuadamente o tomar la temperatura al ingreso de Condominios, Residenciales, Tiendas, Centros Comerciales y de Salud.

Vale resaltar que la labor imprescindible de los colaboradores al margen de la seguridad, no solamente queda aquí, con esta nueva realidad a la que estamos tratando de adaptarnos día a día, sin duda alguna los servicios de seguridad privada han contribuido y siguen contribuyendo a dar cumplimiento a las medidas sanitarias impuestas por el gobierno durante esta alerta sanitaria, ayudando así al mantenimiento de la seguridad publica en nuestro País.

La parte positiva de la crisis en cuanto a la seguridad privada, es que nuestros colaboradores ven su trabajo mas reconocido y que el sector en general se reinventa con mas tecnología, formaciones y capacitaciones cada día.